Os exseminaristas da Mariña volven a Viveiro

De Izqda., a Dcha.: Ramón Barro, Pedro Sánchez Marful, Jesús Rodríguez Pena, Daniel González Artiaga, Alfonso Pernas Rey (delante), Ricardo Timiraos, Manuel Iglesias Vilela, Antonio Vidal Reigosa, Emilio Prado Piñón, Manuel López Rico, Francisco Cal Pardo, José María Rodríguez Carballeda, Manuel Villares, Benigno Rey Sarmiento y Manuel del Río Ferro

Como en 2016 (inicio de la “segunda etapa”  de xuntanzas  liderada por Timiraos) como ya en la  “primera”,  promovidas por Carlos Adrán, los exseminaristas de la Mariña lucense han vuelto a  Vivero, la tierra prometida. Fuimos convocados para el martes 23 de julio y allí estaban, primero en la capilla de la residencia Betania, luego en el  restaurante Carlos V -espléndido mirador  donde el fatigado Landro rinde viaje-, quince hombres buenos. Emilio Prado Piñón, veteranísimo capellán de la Residencia, nos habló de fraternidad y de lo sustancial  que une a los exseminaristas. Don Emilio eleva su homilía más allá de  los nubarrones de San Roque, tanto que a uno le entran ganas de ingresar en Miraflores. Hubo recuerdos de los compañeros vivarienses que ya no están entre nosotros; creo recordar a Suso,  “El Vivariense”; a  uno de los hermanos Prieto, Xuxo Pigueiras (“O Morrosco” le llamaban sus compañeros, con toda razón), los curas Llenderrozos, Fole, Adrán… Todos en el corazón y la memoria. Excusaron su ausencia Perfecto Otero Hermida y Antonio Méndez Escourido, ambos residentes en Vivero pero quebrantados de salud, y Germán Castro, ferrolano habitual de estos cónclaves  que no pudo desplazarse por un compromiso familiar imprevisto.

No hubo cánticos regionales –ni gregorianos- esta vez, pese a la presencia del corista Dani Artiaga (del Coro del Real Casino de Madrid), pero sí promesa firme de renovar abrazo el año que viene. Timiraos tomó nota,. R. B.

 

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*